Mundo, no soy parte de ti, y aunque me cueste, te seguiré soñando porque algo magnético se apodera de mí, rememoro más de una década. La vida se traduce a decirme algo al oído que nunca escuché y que soñé que alguna vez pasó.
Seguramente fue, no, no quiero, no me gustas...
Aún así, mi corazón es puro y desea fielmente que después de todas tus tormentas seas feliz.
Debería alejarme y viajar lejos.¿ Así es enamorarse?
Duele y cansa, me despierta en la madrugada, me hace suspirar, soñar.
Es raro, mi cuerpo se dio por vencido, ah... Pero mi alma, es lo más valiente del planeta.
Quisiera explicar tanto, y por primer a vez, quedé desconcertada y sin palabras.