La esclavitud premiada.

Anoche,hoy y seguramente que mañana seguirá todo desparramado.Es inconcebible que los zapatos sean una trinchera o una barricada en la noche,pero,como yo sé saltar lo hago al estilo circense la luna está llena y los colores son brillantes tanto así que no duermo,aprovecho el fulgor de la ventana y describo porqué los amantes siguen la velada.Hay veces que la palabra agobia,la lectura en cambio las escuchan los ojos y la interpreta el corazón. Sí,ha nacido en un lugar la imaginación seca,esa que por muchas conjeturas no se hila con nada,esa costumbre ese resplandor creativo no pega ni junta porque la idea es seca,no hay vertientes ni letras porque no se han fertilizado. En el fondo,plantearse que decidirás por el prójimo es gratificante,no reclamas por caerte en el salto mortal oscuro,no te confundes los recuerdos son de esa persona casi perfecta,cuando caminas solo cuando te metes en problemas ,hay inexplicablemente un sentido. Mirando lo verosímil anterior es obvio que no se sabe el futuro,el imaginario colectivo desea inmortalizar lo que una vez fue feliz. Dulcemente miro filosamente el dueño de la zapatilla y me acuesto al lado con una sonrisa por salir ganadora en la vida.